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“A través de la voz de las familias y sus peques”…

Rocío madre de Román, nos cuenta: “Estamos muy contentos con las sesiones y sobre todo con el trato recibido. Es muy personalizado y la atención genial”

Jose Antonio y Patri, padres de Elena, nos cuentan: “Muy agradable, se preocupan de hacer que los niños disfruten aprendiendo y desarrollando su interés por la música”.

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Marcelino y Mabel, padres de Marce, nos cuentan: “Marce ha evolucionado muchísimo en atención, psicomotricidad fina, gestión de tiempos,… un gran apoyo! 🙂 “

Ali, madre de Angel, nos cuenta: “Cuando empezó, se trataba de que centrase la atención. Y recuerdo tener que sentarle en su trona y atarle para que aguantase 1 pequeña sesión de al menos 1/2 horita. Ahora, entra sólo al cuarto contigo y, juntos en la alfombra, compartís letras y canciones en vuestro propio espacio que no quiere compartir ni con papis ni con hermanos (“Gabi es mia!”). Y la hora ya se le queda corta! Bravo! Y, por supuesto, gracias!”

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Elisa y Angel nos cuentan: “La musicoterapia con Gabriela nos ha aportado una herramienta para facilitar la comunicación a través de la música, permitiendo desarrollar la creatividad de nuestra hija y darle motivación para conseguir nuevos retos.”

Margarita, abuela de Maria, nos cuenta:“Hemos tenido una bonita experiencia con MUSICOTERAPIA en beneficio para Maria las terapias a sido estupenda Maria espera contenta que llegue el martes para trabajar con Gabriela un beso de Margarita y Maria”

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“Mis peques son mellizos, niño y niña dentro del TEA.  Empezaron con Musicoterapia a los dos años. Tienen 3 años y 9 meses y continuamos encantados. Fue una suerte descubrir todo lo que la musicoterapia ha hecho por mis hijos y por nosotros los padres.  He descubierto no solo como aman la música sino también todo lo que son capaces de hacer ellos. Nos dejan con la boca abierta! 

Gabriela fue la primera terapeuta y creo la única por la que mis hijos lloraban cuando se iba….”

Yoli y Sebastian, padres de Sebas, nos cuentan:

“Desde el inicio, una experiencia única, tanto para el niño, como para nosotros los padres”

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